Las vacas aportan muchas más emisiones de carbono de las que se creía

El uso del automóvil, aerosoles, y los gases emitidos por diferentes tipos de industria son algunas de las causas del efecto invernadero. A esta lista también se debe agregar la crianza de ganado para consumo humano, que según un nuevo estudio, en los últimos años ha aumentado el porcentaje de emisiones de metano que producen las vacas y que dañan el medio ambiente.

La investigación, publicada en la revista científica Carbon Balance and Management y patrocinada por la NASA y el Joint Global Change Research Institute (JGCRI), concluyó que las emisiones de metano producidas por el ganado aumentaron un 11 por ciento en comparación a las medidas publicadas en 2006 por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático.

Cada una de las mil 500 millones de vacas que existen en el planeta, expulsa entre 113 y 189 litros de metano al día y, sorprendentemente no son las flatulencias las principales causantes, sino los eructos del ganado, pues representan el 95 por ciento de las emisiones de este gas, según el estudio.

Las nuevas cifras también develaron un incremento de un 8.4 por ciento en las emisiones de metano por el proceso de digestión que tienen las vacas lecheras; las emisiones causadas por su excremento aumentaron también en un 36.7 por ciento.

Los investigadores aseguran que se actualizó la información que existía de 2006 basándose en cambios «de masa corporal de los animales, cantidad y calidad de alimento de consumen, producción de leche y el manejo de los animales».

De acuerdo con Julie Wolf, una de las investigadoras que participaron en este estudio, actualmente los animales de ganado son más grandes por lo que necesitan más comida, lo cual ocasiona emisiones de metano más altas.

«Nuestros resultados sugieren que las emisiones de metano hechas por el ganado, si bien no son la fuente principal de emisiones, sí contribuyen en gran parte al incremento de las emisiones observadas anualmente entre la década de 2000 y 2010», se lee en el reporte.

Por su parte, Ghassem Asrar, director del JGCRI y coautor del estudio, aseguró que las emisiones de metano por crianza de ganado han disminuido en países de Norteamérica y Europa mientras que han aumentado en regiones de países en desarrollo.

“Encontramos que las emisiones de ganado que más han aumentado son las de regiones en rápida expansión y desarrollo en Asia, América Latina y África… Encontramos que las regiones con los incrementos más grandes son esas sobre el trópico de Cáncer, seguido por las regiones sobre el trópico de Capricornio”.

Estas nuevas cifras representan 15 por ciento más que las publicadas por la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) y dan un nuevo panorama de la problemática del cambio climático y efecto invernadero, así como posibles soluciones para frenar el deterioro del medio ambiente.

Fuente.