Condena internacional por detención de activista turco

La organización internacional de derechos humanos Human Rights Watch (HRW) calificó de “profunda injusticia” la medida de prisión preventiva contra el empresario turco Osman Kavala, conocido por su activismo en la sociedad civil.

Kavala recibió la prisión preventiva después de haber sido detenido el 19 de octubre pasado y acusado de “intentos de derribar el orden constitucional” e “intentos de derrocar el Gobierno de la República Turca”. Según HRW, al empresario, heredero del conglomerado de empresas Kavala, fundador de la ONG Anadolu Kültür, mecenas artístico y famoso activista a favor de iniciativas de diálogo y paz, se le acusa de haber instigado las protestas del parque Gezi en 2013 y de estar vinculado al fallido golpe de Estado de julio de 2016.

Estas acusaciones aparecieron en varios diarios cercanos al Gobierno y se concretaron finalmente en la acusación presentada ayer al tribunal. “El caso contra Osman Kavala es un ejemplo vergonzante de cómo a las campañas de calumnias de los medios progubernamentales en Turquía les siguen decisiones politizadas de los tribunales”, denunció HRW en un comunicado.

“Solo días después de que se pusiera en libertad a diez activistas pacifistas en Estambul, el caso de Kavala demuestra que el gobierno pretende continuar la presión sobre los defensores de los derechos humanos y la sociedad civil”, dice la nota. El lunes pasado, un tribunal decretó libertad con cargos para diez detenidos, entre ellos el alemán Peter Steudtner y la directora de la rama turca de Amnistía Internacional, Idil Eser, que llevaban desde julio en prisión preventiva.

El descontento por la detención de Kavala recorrió Europa. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia emitió una declaración manifestando su preocupación por el arresto del empresario, calificándolo “una de las figuras más importantes y respetadas de la sociedad civil y la cultura de Turquía”. La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Agnes Romatet-Espagne, dijo a los periodistas que Francia permanecerá “muy atenta” al desarrollo del caso.

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