La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) recientemente publicó un vídeo que muestra los diferentes prototipos para el muro del Presidente Donald Trump en San Diego. Y no pudimos evitar notar algo raro en el vídeo. Muestra el muro desde la perspectiva de un dron, que está a una altura muy superior al muro.
¿Entienden lo que significa esto? Se supone que este muro va a, en las palabras del Presidente Trump, evitar que “las drogas fluyan dentro de los [Estados Unidos]”. Pero lo gracioso de un muro es que se puede cruzar de forma relativamente fácil hoy en día, especialmente considerando el bajo coste de los drones. De hecho, el propio vídeo de la CBP demuestra lo fácil que sería cruzar el maldito muro.
¿Recuerdan al norteamericano que estaba traficando casi 6 kilos de metanfetamina utilizando un drón este verano pasado? El ciudadano estaba realizando su operación cerca del sitio donde están construyendo los prototipos del muro en San Diego. La barrera propuesta del Presidente Trump no haría nada para evitar una situación como esa. La única cosa que sí funciona en tales casos es lo que ya funcionaba sin el muro: agentes que detectan a los criminales en la frontera.
Le pregunté a la CBP sobre esto, y al parecer, reconocieron que el muro no hace nada solo.
Lo gracioso sobre la promesa de Trump de construir un muro es que no es lo que ha pedido la CBP repetidamente a lo largo de los años. La agencia en realidad quiere más tecnología. Quieren tecnología como la que se ha empleado en la frontera durante décadas, como cámaras y sensores. Pero no es lo que el presidente tiene en mente.
Se estima que el muro propuesto del Presidente Trump podría costar entre $15.000 millones (según republicanos como Mitch McConnell) y $70.000 millones (según la senadora demócrata Kamala Harris). No obstante, da igual el coste final, ya que México ha afirmado que no pagará por ello.