El ecologismo de los pueblos de México es constantemente atacado, pero no se rinden sin luchar. Los megaproyectos mineros y las invasiones han provocado el despojo de tierras en todo el país, mientras que las fumigaciones aéreas con agroquímicos han envenenado los ríos que proporcionan agua potable a millones de ciudadanos que viven en sus riberas o cerca de ellas La construcción de presas amenaza la biodiversidad al inundar grandes zonas donde viven muchos animales; las centrales hidroeléctricas producen electricidad excesiva a un gran coste sólo cuando hay necesidad, porque la mayoría de los países dependen de las turbinas eólicas, que pueden ser poco fiables.
El Atlas documenta 173 conflictos y 56 casos de «acción estatal» contra el medio ambiente -término que se utiliza para describir cualquier acto realizado contra los espacios verdes, como la deforestación.