Desbandada en el PRI: renuncias de dirigentes y fuga masiva de militantes

El Partido Revolucionario Institucional (PRI) se enfrenta a una crisis con la renuncia de destacados dirigentes y la salida silenciosa de más de 5 millones de militantes.

En el último lustro, el PRI ha sufrido 22 derrotas en elecciones a gobernadores, lo que ha contribuido a su deterioro. Además, más de 5 millones de militantes han abandonado el partido, afectando su base y su capacidad de movilización. Las renuncias de destacados cuadros, como Osorio Chong, Ruiz Massieu, Eruviel Ávila y Nuvia Mayorga, así como la fuga masiva de militantes, han debilitado aún más al partido.

La salida de militantes y dirigentes ha sido motivada por diversos factores, entre ellos, la corrupción durante el gobierno de Enrique Peña Nieto y las desavenencias internas en la dirigencia encabezada por Alejandro Moreno. La crisis interna y la falta de resultados electorales han llevado al PRI a perder credibilidad y confianza entre sus simpatizantes.

La desbandada del PRI tiene implicaciones directas en las próximas elecciones de 2024, donde se elegirá la Presidencia de la República, el Congreso de la Unión, gubernaturas, congresos locales y ayuntamientos. La reducción de la fracción parlamentaria en el Senado y las renuncias en diferentes estados minan la presencia y la fuerza política del partido.

Expertos y exdirigentes del PRI muestran preocupación por la situación y advierten que, de no revertir la tendencia, el partido corre el riesgo de convertirse en una fuerza política irrelevante. La crisis actual plantea la necesidad de cambios profundos en la dirigencia y en la estrategia del PRI para recuperar la confianza de los ciudadanos y reposicionarse en el panorama político nacional.