Jorge Winckler, el fiscal de Veracruz, ha dado a conocer cifras que ayudan a dimensionar el horror en uno de los Estados que más ha sufrido el castigo de la delincuencia organizada. En solo seis años, las autoridades periciales han hallado más de 343 fosas clandestinas en la entidad enclavada a lo largo del Golfo de México. Allí, enterrados sin nombre y con marcas de la inmutable violencia, han sido encontrados 225 cuerpos de las cuales solo 111 personas han sido identificadas por sus familias.
Por su parte, el colectivo ‘El Solecito´, en su página de Facebook publican decenas de anuncios de jóvenes, hombres y mujeres que desaparecieron sin dejar rastro. El grupo ha llevado a Internet estos anuncios, que en el mundo analógico tapizan los tablones de anuncios de los aeropuertos y las estaciones de autobuses en los municipios con el colindante Estado de Tamaulipas. En Veracruz, más de 1.000 personas se han hecho pruebas de ADN con la esperanza de que que alguna autoridad les dé información sobre sus conocidos ausentes.
Las 342 fosas de Veracruz están distribuidas en 102 sitios a lo largo de 44 municipios. El Estado, que tiene 212 municipios, tiene una superficie similar a la de Irlanda o Panamá. El municipio de Veracruz, la ciudad más grande de la entidad, registra 173 fosas. Las localidades de Agua Dulce, Pueblo Viejo (Misantla), Tres Valles y Alvarado tienen 16 fosas cada una.