Polémica por denuncia de abuso sexual contra Kobe Bryant

En medio de los mensajes de dolor por la muerte del ex basquetbolista, la comunicadora Felicia Sonmez decidió traer a la luz un episodio que parecía borrado del pasado del cinco veces campeón de la NBA. A partir de su acción, el caso no solo no cayó en el olvido, sino que logró una enorme repercusión. Así se volvió a poner en escena el debate respecto de si es correcto separar al artista y a su obra de su vida personal. Es decir, si el recuerdo de las personalidades (Kobe Bryant, en este caso) puede distanciarse de los aberrantes hechos que han cometido fuera del campo de juego. También se pone sobre el tapete el castigo social que reciben aquellas que deciden alzar su voz -como Somnez-, para que estos casos no pasen desapercibidos ni se borren de la memoria colectiva.

Horas después se supo que Sonmez fue suspendida de su trabajo. Tracy Grant, editor jefe del Washinton Post confirmó al Daily Mail de Inglaterra que la periodista “fue desplazada a un puesto administrativo, mientras se decide si los tuits sobre la muerte de Kobe Bryant han violado la política del periódico”.

En junio de 2003, Kobe Bryant ya era una gran estrella del básquet. Sin embargo, la última temporada con Los Angeles Lakers -tras ganar tres anillos consecutivos de la NBA- no había sido buena y una persistente tendinitis en una de sus rodillas lo obligaba a pasar por el quirófano. Durante su proceso de recuperación, el jugador se alojó en un hotel de Oregon. Allí conoció a una trabajadora del establecimiento, a la que invitó a recorrer las instalaciones del lugar y a la que, más tarde, hizo pasar a su habitación. Un día después, esa joven de 19 años se presentó ante las autoridades policiales para hacer una grave denuncia: Kobe Bryant la había violado.