La Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), uno de los centros privados más importantes en México, junto con la Fundación Mary Street Jenkins, se encuentran cumpliendo 150 días desde la toma de sus instalaciones y la lucha por su patronato.

En 1905, llega desde Tennessee, Estados Unidos, el empresario William Oscar Jenkins Biddle, que junto con su familia llegó a vivir a Puebla enamorándose de México. Por lo que en 1954 crea la Fundación Mary Street Jenkins para destinar su fortuna a mejorar la calidad de vida de aquellos que consideró su pueblo, donando dinero y tierras para escuelas, hospitales, e impulsar la cultura, siendo la UDLAP una de las instituciones impulsadas por la fundación.

A través de los años, se han creado reformas dentro de la fundación para blindar el patronato y que no pueda entrar nadie que no sea descendiente de Mary Street Jenkins (esposa de William Oscar Jenkins Biddle), también se creó una reforma que estipula que los activos se destinan a objeto social, entre otras.

Sin embargo, las acciones de la Fundación Jenkins han estado en la mira del Gobierno e intentando entrar en él. Comenzando con el Gobierno de Moreno Valle, quien aprovechó para cambiar la Ley de Instituciones de Beneficencia Privadas que dio la facultad al Gobierno de cambiar patronatos de las fundaciones a su antojo; pero esta enemistad no pasó a mayores ya que Moreno Valle tenía aspiraciones presidenciales.

Ante el interés del gobernador y de Guillermo Jenkins de Landa por acceder a los recursos de la fundación, la familia Jenkins decidió proteger los recursos moviéndolos fuera de su alcance. Lo que derivó en una denuncia en el 2016, hecha por Guillermo Jenkins de Landa denunciando a su madre Elodia Sofía de Landa y a sus hermanos por un supuesto desvío de recursos con valor de 720 millones de dólares; que luego en el 2018, la denuncia fue declarada por la PGR, como no constitutiva de delito.

Tiempo después, en el 2020, el mandatario Alejandro Gertz, revoca el NEAP (No Ejercicio de la Acción Penal) a la Fundación Jenkins, consiguiendo una orden de aprehensión para Elodia Sofía de Landa y sus hijos. A su vez, reabre el caso, teniendo que pasar por un proceso injusto ya que se encontraba cerrado y legalmente nadie puede ser juzgado en dos ocasiones por el mismo delito, por lo que ese juicio no debe de realizarse.

En junio de 2021, la UDLAP es tomada con violencia por la Policía Estatal, acto seguido el Juzgado Federal ordenando la devolución inmediata de las instalaciones a su patronato, la Fundación Jenkins. Y tras tres largos meses de espera, el Gobierno de Barbosa, creó un «Patronato Espurio» para la Fundación Jenkins, y así llevar a cabo la «devolución» de la UDLAP, dejando al Patronato Oficial fuera de la jugada.

La toma de la UDLAP es solo un ejemplo de lo fácil que es para el Gobierno de Puebla acomodar sus leyes para La sociedad en general ha expresado su preocupación por la toma de la UDLAP, ya que pone en evidencia lo fácil que puede ser perder tu patrimonio en el país cuando un funcionario se empeña en ello.