Nacida en Louisiana, creció en Tokio y actualmente vive en Barcelona, pero viaja por el mundo dándole toques de color a cada país que pisa con sus intervenciones en murales.
Aunque esta artista urbana usa una gama de colores brillantes para sus piezas, no causa ataques epilépticos a quien los ve. Sin importar que sus murales sean una explosión de color, los diseños y patrones que plasma son amigables para la vista y tienen el efecto de querer verlos por la eternidad para descubrir formas nuevas que se esconden entre ellas.
La elección del lugar donde va a intervenir con sus diseños se basa en la monocromía del espacio que lo rodea para causar el impacto positivo que la ha hecho conocida.
Hace unos años se unió con el artista Zosen y desde entonces han trabajado en colaboración para la creación de los murales masivos que invitan al transeúnte a voltear la vista y dejarse hipnotizar por los colores que usan.
Además de los murales gigantes, también hace intervenciones en espacios públicos con objetos cotidianos como botellas de plástico con sus diseños coloridos. Mina Hamada también trabaja a pequeña escala con trabajos en papel y lienzos de tamaño regular.
Los títulos de sus piezas, además de la temática detrás de estas, hacen referencia a su background transcultural que forma parte de su identidad.
Para ver más piezas coloridas de Mina Hamada y su trabajo en colaboración con Zosen puedes ver su Instagram, Tumblr y página web.
Mina Hamada se encontrará del 24 al 26 de noviembre en asistencia al Festival Internacional de Arte Urbano. Un festival que, además de traer varios de los talentos más importantes del mundo del arte urbano para impartir talleres, workshops y, claro, pintar, entablará ponencias y mesas de discusión sobre la importancia del arte urbano en la actualidad. 26 artistas invitados, muros pintados en vivo, skate, parkour, streetball, galerías y más tomarán un encuentro para celebrar la cultura urbana en todas sus aristas en la CDMX.
