Definitivamente uno de los temas que más polémica ha ocasionado en el norte del país durante la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador es la construcción de una planta cervecera, en Mexicali, Baja California, por parte de la empresa Constellation Brands, la cual ha insistido en su instalación a pesar de su cancelación a través de una consulta popular, confirmó el mandatario.
Su declaración fue: “Necesitamos el crecimiento económico, pero sin dañar el medio ambiente. No podemos seguir derrochando y quedándonos con la herencia de las generaciones futuras”, Esto durante la conferencia de prensa matutina de este 12 de agosto.
El titular del Ejecutivo federal igualmente mencionó que los representantes de la transnacional estadounidense han intentado “darle la vuelta” a la consulta popular que se llevó a cabo para echar abajo el proyecto y continuar con su construcción en ese territorio.
“Ya quedó de manifiesto no puede construirse en Mexicali porque así lo decidió la gente y en la democracia, el pueblo manda. No se van a otorgar permisos del gobierno federal para que opere la planta”, puntualizó López Obrador, quien detalló que habló con los directivos para que buscaran otras opciones, pues en la zona donde se instalaría la planta hay escasez de agua.
También señaló que el 70% del agua del país está en el sureste del país e hizo referencia a las áreas aledañas a los ríos Grijalva, Papaloapan y Usumacinta, como territorios en donde se podría instalar la planta: “Ahí sí damos permiso, porque hay agua, pero en el desierto no podemos hacer eso”.